EMPRENDEDORES: MUJERES CON MARCA PROPIA
Narda Lepes vive de lo que a ella le apasiona, objetivo que persiguen muchos emprendedores. Como manejó el crecimiento de su marca y qué recomienda para los que deciden iniciar su propio camino.
¿En qué momento de tu carrera te diste cuenta de que "Narda" se estaba convirtiendo en algo grande?
Cuando empezás a grabar en tele, lo hacés en un estudio donde estás con otras quince personas, siete que miran para otro lado y otros que están atendiendo cosas específicas. Vos sos una persona más que pasa por un estudio. Al principio no tenés una respuesta del público o una reacción. Hasta que me di cuenta de que había gente que escuchaba lo que yo decía y lo tomaba como verdad. Venía alguien y me decía "Ahora como brócoli", y otro me decía "Ahora en mi familia comemos muchas cosas que antes no comíamos".
Al comprobar la influencia que estabas teniendo, ¿cambiaste algo en la forma de hacer las cosas?
Tal vez antes me preocupaba más por la receta. Y eso era solo el empaque. A la larga nadie se va a acordar si en una receta eran 200 o 300 gramos. Se va a acordar de cómo se limpia un alcaucil o que el wok siempre tiene que estar bien caliente. Traté de concentrarme en el contenido y de prepararme mucho más. Si vamos a hablar del alcaucil, entonces asegurarme de que transmito información útil, no técnica. Yo quiero que lo que se lleven no sean formulitas.
En tu trabajo fuera de la Argentina, ¿notás que hay diferencias culturales que te obligan a adaptar los productos, las recetas, los programas o las charlas?
Cuando arranqué en la tele lo hice con la premisa de que era para Latinoamérica. Eso no quiere decir que voy a hablar en "neutro", primero porque no me sale y segundo porque no es auténtico. No voy a decir "betabel" en vez de "remolacha". Soy una tarada si hago eso. Porque además lo estás viendo, es muy ilustrativa la tele. Pero sí me preocupé, en mis viajes, de buscar objetos y anécdotas de los distintos lugares. Entonces de repente digo: "A esto le vas a dar la forma como si fuera una carimañola (un bocadito frito colombiano)". El peruano o el argentino no saben qué es una carimañola pero al colombiano que lo escuchó, le llega, le toca. O uso cacerolas de barro de Venezuela, cosas muy típicas, visito los mercados más populares en cada ciudad, donde se venden "los trastos" y me voy trayendo de todo un poco.
¿Cuán importante es la gente que te rodea para que vos puedas lograr lo que querés, es decir, tu equipo de trabajo, empleados y asesores?
Es fundamental. Yo estoy en el centro y eso hace que no pueda ver las cosas desde afuera. Para eso tengo que confiar en la mirada de otros.
¿Qué cualidades son importantes a la hora de elegir personas para trabajar con vos?
Que en algo sean mejor que yo. Porque sino a la larga me empiezo a poner nerviosa y lo termino haciendo yo, y eso no sirve. Y también que le guste lo que hace porque así me genera confianza. Yo sé que si a vos te gusta tu trabajo, no te apagás cuando termina el día. Yo creo que muchas de las soluciones no se encuentran en el momento, sentado en un escritorio, sino que se te ocurren cuando estás tomando una cerveza con un amigo en un bar a las dos de la mañana. Tenés que tener la cabeza relajada para buscar una solución a algo fuera de lo establecido.
¿Crees que todo el mundo se puede plantear vivir, como hacés vos, de algo que le apasiona?
Creo que si lo hacés a tiempo, sí. Te tenés que dar cuenta cuando tenés la energía para pedalear cuesta arriba. A los veinte y pico te podés equivocar, empezar de vuelta, dejar una carrera, no importa, empezás otra cosa. Lo que sí me parece que le pasa a muchos chicos es que vos no te podés preparar para saber lo que vas a hacer. Cuando tenés veinte años no sabés los trabajos que hay. Por eso te conviene elegir lo que te gusta. No importa qué, pero tratá de hacer lo que te gusta porque estar frustrado en un trabajo no está bueno. Salvo que seas una de esas personas que cumple ocho horas y luego se va a hacer "kite-surfing", que sé yo... Pero si no tenés un hobby muy marcado, entonces aprovechá para trabajar de lo que te gusta.
¿Cuán importante es la gente que te rodea para que vos puedas lograr lo que querés, es decir, tu equipo de trabajo, empleados y asesores?
Es fundamental. Yo estoy en el centro y eso hace que no pueda ver las cosas desde afuera. Para eso tengo que confiar en la mirada de otros.
por Buenos Negocios